Qué es la serigrafía semiautomática
A continuación, vamos a descubrir en qué consiste la serigrafía semiautomática, pues es una de las técnicas que todavía se conservan y que usan muchas empresas dedicadas a esta labor.
Recordemos que existen diversos tipos de serigrafía, entre los que se usan mucho tanto la manual, más casera y simple, y la automática, con grandes máquinas que ya hacen todo y suplantan por completo al ser humano.
Sin embargo, la serigrafía semiautomática es la que incluye tanto al operario como a la máquina, ya que cada uno de ellos tiene su papel importante en el proceso.
La serigrafía semiautomática
Recuerda que entendemos por serigrafía como la técnica que se utiliza para imprimir objetos a través del grabado de imágenes. Para ello, se usa una pantalla de seda o una finísima tela metálica.
Este sistema, que a mucha gente le puede resultar muy moderno y actual, realmente se lleva practicando desde hace más de 5000 años. Según hemos podido saber por estudios y trabajos sobre el terreno, ya las culturas orientales practicaban la serigrafía allá por el lejano año 3000 a.C. Las primeras impresiones descubiertas proceden de las islas Fiyi. Los antiguos pobladores de la zona distribuían las tintas por medio de hojas de plátano agujereadas.
En la actualidad, disponemos de serigrafía manual, automática y semiautomática. Esta última, que es la que nos interesa, coloca al operario en el centro de la actividad, pero se basa en la máquina para acabar con el trabajo.
El operario es el que coloca sobre la base de la máquina una pieza que se ajusta según la posición que se desea. A partir de ese momento, será la máquina la que haga todo el trabajo, bajando la pantalla. También hará el pase de racleta, que es el que transfiere la tinta sobre la pieza.
Una vez está listo el trabajo, el operario retirará la pieza y todo estará preparado para que empiece el proceso de secado final.